26 de junio de 2016

Compañera roja

Fueron años de viajes cotidianos y una que otra escapada. En los días de lluvia mantuvo a salvo mis libros, sostuvo mi lap top con todo su peso y delicadeza, soportó viajes extremos en metro (lleno, vacío, mojado, a reventar), trabajos de campo en zonas "peligrosas" de la ciudá. Guardó mis sueños y mis tristezas. Fue compañera de batalla, una guerrera de lona roja. 

Me la compraron cuando iba en los primeros semestres de la prepa. Necesitaba una mochila donde cupiera mi carpeta (de esas a las que le caben 200 hojas). Es chistoso que sus últimos días hayan coincidido con los últimos días de universidad. La despido con estas palabras porque sé que también me estoy despidiendo de una etapa de mi vida. 



Fotos de su último viaje (Cuentepec y Cuernavaca, Morelos)