![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiebeNkJ7Ar-ElCk-pz0XSJyxC_9hXCAaliq4WLyEfcO-JpIVlbyKzkdjwCrcVEO4J2d1WGUAcLPlDF1EXYIyG8wlfJ22ULY9aeg9ROJ7MrtPLX1rhY31IPrEJH4CIzfhmVMtJNpaqOoNo/s320/368449912_YEDIBTGPLPECDQK.jpg)
Y después de tanto miro hacia atrás. Imposible no encontrarte entre mis pasos. Como si pudiera alguna vez borrarte, como si quisiera quitarme una cicatriz tallándola tallándola.
He aprendido a vivir sin ti. Mi vida ha cambiado mucho; aun cuando despierto por las mañanas con la misma música ochentera, y mi cabello sigue siendo un desorden. Soy más organizada, he leído montones de palabras, y hasta he encontrado unos cuantos lugares mágicos en la ciudad. Cambié de casa, de lentes, de zapatos.
Pero de vez en cuando te recuerdo con cierta nostalgia. Recuerdo que te traigo aquí todo el tiempo; bien adentro del corazón. Recuerdo que te he extrañado en silencio, y que si ya no siento ese viejo amor enfermizo, es porque me lo tragué.
Qué no daría por tener junto a mí a mi tonto preferido (?).
Y sé que aunque lo nieges tú también piensas en mí, lo sé, puedo sentirlo.